La Fundación Centro de Solidaridad atendió a 1.228 personas por adicciones en 2023
NoticiasSocios03 mayo 2024
La cocaína y el alcohol vuelven a ser los principales motivos de demanda de tratamiento
Un año más, fiel a su cita, la Fundación Centro de Solidaridad-Proyecto Hombre ha presentado la memoria de las actividades realizadas el año anterior. En 2023, atendió a un total de 1.228 por adicciones, principalmente a cocaína y alcohol, y cerca de 1.700 personas –entre ellos sus familiares- participaron en algunos de sus programas.
El presidente de la Fundación, Carlos Gómez; la presidenta del Comité Ejecutivo, Pilar Aznar, y el director gerente, Jesús Sánchez, fueron los encargados de presentar la memoria.
De acuerdo con los datos, el 80% de las personas atendidas fueron hombres y la media de edad llegó a los 40,9 años (la más joven tenía 14 y la mayor, 75 años). Un año más, el consumo de cocaína fue la principal causa que motivó el tratamiento (con el 24,26% de los casos), seguido de cerca por los problemas con el alcohol (23,77%).
La fundación desarrolla su trabajo a través de tres grandes líneas de actuación. Por un lado, el área asistencial, a través de su comunidad terapéutica, un piso supervisado y las áreas de diagnóstico y tratamiento; por otro, el área de prevención, mediante una consultoría de intervenciones psicoeducativas con adolescentes en riesgo y el programa de jóvenes Tarabidán; y por último el área de intervención en centros penitenciarios y servicios jurídicos.
Renovación del patronato
La Fundación Centro de Solidaridad de Zaragoza, socia de Ebrópolis, se creó en 1985 y en octubre de ese año puso en marcha el programa Proyecto Hombre. Está integrada por Cáritas Zaragoza, Grupo San Valero y Hermanas de la Caridad de Santa Ana y actualmente en ella trabajan un total de 44 profesionales.
Como ha informado Cáritas Zaragoza, también socio de Ebrópolis, a principios de este año la fundación decidió unificar las labores del patronato y el comité ejecutivo. Este último queda disuelto y sus funciones las asume el patronato, que se ha renovado y está compuesto por miembros de la misma fundación, de Cáritas Diocesana de Zaragoza y de personas designadas por el Arzobispado de Zaragoza.