Fundación CAI y Fundación Centro de Solidaridad de Zaragoza celebran aniversarios especiales

Fundación Caja Inmaculada y Fundación Centro de Solidaridad de Zaragoza están de enhorabuena. Ambas entidades, socias de Ebrópolis, han celebrado recientemente sus aniversarios, de nada menos que 120 y 40 años, respectivamente. Dos trayectorias que coinciden en un punto común, su compromiso con los aragoneses.

La Fundación CAI ha realizado en el Auditorio de Zaragoza el acto conmemorativo Estar presente, con el que ha puesto en valor su trayectoria y su compromiso con el progreso de Aragón. Nacida como una caja de ahorros con profunda vocación social, ha mantenido vivo su legado fundacional, adaptándolo a las necesidades de cada momento histórico y situando siempre a las personas y al territorio en el centro de su labor.

A través de su labor, la Fundación, una de las entidades fundadoras de Ebrópolis, ha contribuido a fortalecer el tejido asociativo, fomentar la solidaridad y promover la igualdad de oportunidades. Y es en la actualidad una fundación moderna, activa y comprometida con el desarrollo de la comunidad aragonesa

Fundación CAI continúa evolucionando para dar respuesta a los nuevos retos sociales de Aragón: la digitalización, el envejecimiento activo, la sostenibilidad o la cohesión territorial. La entidad mantiene su compromiso con una sociedad más justa y solidaria, reafirmando su papel como motor de progreso y de bienestar colectivo.

Los responsables de la fundación consideran que su 120 aniversario es no solo una celebración del camino recorrido, sino también una invitación a continuar sumando esfuerzos para cuidar el presente y construir, entre todos, el mañana.

Una respuesta a un grave problema social

Por su parte, la Fundación Centro de Solidaridad de Zaragoza ha celebrado en el Teatro Principal un acto con motivo de su 40 aniversario, en el que ha entregado los Premios Proyecto Hombre a la Solidaridad a Jesús María Alemany Briz, presidente de Honor del Seminario de Investigación para la Paz, y La Ronda de Boltaña.

Centro de Solidaridad-Proyecto Hombre nació en un contexto en el que la droga, particularmente la heroína, estaba causando estragos en la juventud española. Una visita del entonces arzobispo de Zaragoza, Elías Yanes, en 1984 a Italia le permitió conocer el Progetto Uomo, que ayudaba a los jóvenes italianos enganchados a las drogas. Un año después, con este modelo de rehabilitación como referente, nacía Proyecto Hombre, el programa de atención a las drogodependencias, que actualmente presta ayuda a más de 1.200 personas en Aragón.

Durante estas cuatro décadas, el programa de la Fundación Centro de Solidaridad de Zaragoza, que cuenta con la colaboración del Ayuntamiento de Zaragoza, ha consolidado su compromiso en la atención a las adicciones, adaptando sus respuestas a las necesidades de las personas atendidas.