Reunión del Observatorio Urbano de Ebrópolis

El Observatorio Urbano prepara el Informe Anual de Indicadores

Informe de EbrópolisNoticiasObservatorio urbano
30 septiembre 2022

El equipo multidisciplinar que forma la comisión de indicadores del Observatorio Urbano de Ebrópolis ha mantenido una nueva reunión para analizar los indicadores de seguimiento de la Estrategia Zaragoza +20 y preparar el próximo informe anual. Todos los miembros de esta comisión son representantes técnicos de los socios fundadores (Ayuntamiento de Zaragoza, Cámara de Zaragoza, CCOO Aragón, CEOE Zaragoza, Diputación Provincial de Zaragoza, Gobierno de Aragón, Fundación Ibercaja y Universidad de Zaragoza) junto con miembros de la oficina técnica de la asociación.

Durante este primer encuentro para la valoración de los indicadores correspondientes al año 2021, la comisión constata, según los datos recogidos, que sigue habiendo indicadores que se muestran afectados por las medidas Covid, tanto por la limitación de movimientos, ya que durante el año 2021 todavía hubo restricciones, como por las repercusiones económicas y sociales de la pandemia. En la sesión de trabajo, celebrada en Casa Soláns, los asistentes también han podido conocer las últimas novedades que desde la Oficina Técnica se están introduciendo para la gestión de los indicadores y que pronto serán presentadas.

Sistema de Indicadores

El Observatorio Urbano tiene como principal función medir y evaluar con datos objetivos el avance de Zaragoza y los municipios de su entorno en relación con la Estrategia Zaragoza +20 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de Naciones Unidas. En la actualidad, el Sistema está constituido por un total de 150 indicadores, todos ellos basados en fuentes oficiales y procurando además que tengan continuidad en el tiempo y sean comparables y se agrupan entorno a las seis grandes dimensiones de la Estrategia Zaragoza +20.

Otra característica importante del Sistema es su carácter abierto y flexible, por lo que la información proporcionada no es puntual ni cerrada y permite adaptarse a la realidad siempre cambiante, incorporando nuevos indicadores, modificando otros o marcando nuevos parámetros de valoración.

 

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